jueves, 19 de noviembre de 2015

Síndrome Uveo Dermatológico.

Es una enfermedad de origen inmunológico en la que se producen anticuerpos en contra de los melanocitos, células encargadas de la producción de melanina, como consecuencia de esto los signos clínicos de mayor gravedad se presentan en órganos pigmentados de forma densa, la úvea y la piel.


La enfermedad es descrita en el perro y en el hombre con algunas diferencias, en el caso del hombre generalmente hay manifestaciones de inflamación en sistema nervioso, sin embargo los problemas neurológicos son infrecuentes en el perro, en este los signos más dramáticos y de primera aparición son oculares, un ojo rojo, con inflamación conjuntival y uveítis en grados variables, desde una uveítis  anterior estéril, hasta una panuveitis granulomatosa, que si no es controlada a tiempo puede llevar a cataratas, glaucoma secundario y desprendimiento de la retina con ceguera permanente, razón por la cual la interconsulta con un oftalmólogo veterinario es importante, a los pocos días suele haber despigmentación de los parpados labios y nariz, simétrica y progresiva, en muy pocos casos puede haber presencia de ulceras y costras, si la enfermedad avanza puede desarrollarse despigmentación generalizada de la piel y el pelo en animales de capa pigmentada, Algunas razas son afectadas con mayor frecuencia, Huski Siberiano, Akita, Golden Retriever, Ovejero Ingles, Chow Chow, Fox Terrier, Fila Brasilero, entre otros. El diagnóstico definitivo se fundamenta en la biopsia mucocutanea principalmente de labios y nariz. 

Paciente con despigmentación de la nariz, labio y parpado,
uveítis aguda bilateral. Imagen exclusiva oftalmovetdeleon


La ceguera debe prevenirse con tratamientos intensivos una vez que se diagnostica la uveítis, las lesiones dermatológicas son de menor peligro y con repercusiones  más estéticas. El manejo inicial de la uveítis se puede realizar con Glucocorticoides tópicos y sistémicos, con el uso de Loteprednol en solución oftálmica en combinación con inmunosupresores como la Ciclosporina A en ungüento oftálmico, hemos observado mejorías rápidas aun en casos graves de panuveitis, el uso de Tropicamida como coadyuvante del tratamiento de base es indispensable. Esta terapia tópica se acompaña de Prednisona oral a dosis de inmunosupresión, a las dos semanas ya la evolución debe ser favorable, en este caso se inicia una disminución de la dosis y posología de los fármacos a fin de conseguir una dosis de mantenimiento que mantenga al paciente controlado y con la menor cantidad de efectos adversos inducidos por esteroides, en caso de una falla en la medicación se recomiendan algunos fármacos alternativos como la triamcinolona o betametasona depot en inyección subconjuntival, en pacientes refractarios a terapia sistémica se puede considerar el uso de Azatioprina.


Paciente en el dia primero de su diagnostico y después de 12
días con tratamiento. Imagen exclusiva oftalmovetdeleon 


El futuro de estos pacientes es incierto, la naturaleza de la enfermedad expone al paciente a recaídas y a una vida con medicación continua o estacional, los efectos adversos de los fármacos inmunosupresores exigen un  control periódico de la bioquímica sérica y el hemograma, no es una enfermedad común, pero se debe establecer una sospecha diagnostica cuando se presente uveítis bilateral en ausencia de infecciones, tóxicos y traumas, aparición súbita concomitante con despigmentaciones de piel y mucosas.

2 comentarios:

  1. donde puedo envontrar más información o ayuda para tratar a un perro ? dejo mi correo omargupo@hotmail.com gracias

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  2. Muito boa essa explicação. Parabéns Dr.

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